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CINE-BOFILL (Previsión) 31-03-2005
Primer filme Bofill contrapone mundo droga con inocencia virginal
El primer filme de Ricardo Bofill, 'Hot Milk', que se estrenará el 8 de abril, contrapone el mundo de la fiesta, el desmadre, la droga y el lujo con la inocencia virginal de una niña de pueblo que trabaja en una vaquería y que se transforma durante un fin de semana ibicenco.
Bofill la ha presentado hoy en Barcelona como una película sin más pretensiones que la de hacer 'un cine divertido' y ha dicho que el filme 'habla de cosas importantes, quitándoles hierro'.
'Hot Milk' es una disparatada comedia encargada a Bofill por Canónigo Films, la misma productora de 'Huevos de oro' y 'Jamón, jamón', de Bigas Luna, y 'Airbag', de Juanma Bajo Ulloa.
Está protagonizada por Ana Turpin, Sergio Pazos, Quique San Francisco, Laura Domínguez, Vanessa Otero, Iván Morales, Eloi Yebra, Zoe Berriatua y Santi Ibáñez, entre otros actores y actrices.
Flanqueado por sus principales protagonistas, Bofill ha presentado su primera película con un semblante serio durante una rueda de prensa en la que ha hecho una especie de redención del personaje televisivo que ha exhibido en los últimos años.
'He intentado destruir el personaje que he presentado en los dos últimos años -ha dicho-, porque uno en la vida puede cometer una serie de delirios aunque luego los puede corregir'.
En el filme se alternan escenas algo bucólicas con otras de video-clip y de la noche discotequera que viven personajes inmersos en un mundo de alucinación constante y que toman todo tipo de drogas.
La redención de la que ha hablado Bofill se refleja en el final del filme, cuando uno de los personajes se reconvierte y se sitúa en la puerta de una discoteca, controlando que no entren personas cargadas de pastillas en los bolsillos.
Bofill ha presentado 'Hot Milk' como una fábula, un cuento moderno que mezcla el personaje de la Cenicienta y el de Pigmalión y que tiene a la bella Esther (Ana Turpin) como protagonista, una joven que trabaja en una vaquería perdida en las montañas y a la que le gusta bailar.
A partir de ese comienzo se suceden una serie de escenas disparatadas que, tomando como punto de partida la idea de Esther de ir a Madrid a una convención lechera con animación como reclamo, concluyen en el cambio de destino y la llegada de la muchacha a Ibiza junto a un grupo de personas capitaneadas por un 'hombre mágico' (Sergio Pazos), que cobra por llevarlas a la isla.
Bofill ha señalado que 'el guión no es lo más fuerte de la película' y ha dicho que ha buscado para ella un lenguaje diferente, 'con una parte visual muy trabajada'.
Sobre el estereotipo que se muestra de la vida en Ibiza, Bofill ha considerado que 'ir a Ibiza es como ir a Berlín o a Nueva York', por los personajes tan diferentes que alberga.
Ricardo Bofill ha explicado que para rodar el filme en Barcelona el equipo se ha tenido que levantar a las 5 de la mañana, y empezar el rodaje a hora tan temprana les ha obligado, en las escenas de discoteca, a simular la bebida con 'chupitos' de agua.
Como ejercicio de improvisación, al principio del rodaje el equipo artístico de la película dio vueltas y rodó por el suelo y practicó la risoterapia, ha explicado Ana Turpin.
Quique San Francisco, que recrea en el filme a 'Tanit', la caricatura de un personaje que supuestamente vive en Ibiza y suele ir a la India, ha señalado que si Bofill 'comete el error de llamarme para otra película, yo iré'.
Barcelonés de 40 años, Bofill ha expresado su intención de continuar haciendo películas y de hacer otro filme 'más intimista y psicológico'.
Primer filme Bofill contrapone mundo droga con inocencia virginal
El primer filme de Ricardo Bofill, 'Hot Milk', que se estrenará el 8 de abril, contrapone el mundo de la fiesta, el desmadre, la droga y el lujo con la inocencia virginal de una niña de pueblo que trabaja en una vaquería y que se transforma durante un fin de semana ibicenco.
Bofill la ha presentado hoy en Barcelona como una película sin más pretensiones que la de hacer 'un cine divertido' y ha dicho que el filme 'habla de cosas importantes, quitándoles hierro'.
'Hot Milk' es una disparatada comedia encargada a Bofill por Canónigo Films, la misma productora de 'Huevos de oro' y 'Jamón, jamón', de Bigas Luna, y 'Airbag', de Juanma Bajo Ulloa.
Está protagonizada por Ana Turpin, Sergio Pazos, Quique San Francisco, Laura Domínguez, Vanessa Otero, Iván Morales, Eloi Yebra, Zoe Berriatua y Santi Ibáñez, entre otros actores y actrices.
Flanqueado por sus principales protagonistas, Bofill ha presentado su primera película con un semblante serio durante una rueda de prensa en la que ha hecho una especie de redención del personaje televisivo que ha exhibido en los últimos años.
'He intentado destruir el personaje que he presentado en los dos últimos años -ha dicho-, porque uno en la vida puede cometer una serie de delirios aunque luego los puede corregir'.
En el filme se alternan escenas algo bucólicas con otras de video-clip y de la noche discotequera que viven personajes inmersos en un mundo de alucinación constante y que toman todo tipo de drogas.
La redención de la que ha hablado Bofill se refleja en el final del filme, cuando uno de los personajes se reconvierte y se sitúa en la puerta de una discoteca, controlando que no entren personas cargadas de pastillas en los bolsillos.
Bofill ha presentado 'Hot Milk' como una fábula, un cuento moderno que mezcla el personaje de la Cenicienta y el de Pigmalión y que tiene a la bella Esther (Ana Turpin) como protagonista, una joven que trabaja en una vaquería perdida en las montañas y a la que le gusta bailar.
A partir de ese comienzo se suceden una serie de escenas disparatadas que, tomando como punto de partida la idea de Esther de ir a Madrid a una convención lechera con animación como reclamo, concluyen en el cambio de destino y la llegada de la muchacha a Ibiza junto a un grupo de personas capitaneadas por un 'hombre mágico' (Sergio Pazos), que cobra por llevarlas a la isla.
Bofill ha señalado que 'el guión no es lo más fuerte de la película' y ha dicho que ha buscado para ella un lenguaje diferente, 'con una parte visual muy trabajada'.
Sobre el estereotipo que se muestra de la vida en Ibiza, Bofill ha considerado que 'ir a Ibiza es como ir a Berlín o a Nueva York', por los personajes tan diferentes que alberga.
Ricardo Bofill ha explicado que para rodar el filme en Barcelona el equipo se ha tenido que levantar a las 5 de la mañana, y empezar el rodaje a hora tan temprana les ha obligado, en las escenas de discoteca, a simular la bebida con 'chupitos' de agua.
Como ejercicio de improvisación, al principio del rodaje el equipo artístico de la película dio vueltas y rodó por el suelo y practicó la risoterapia, ha explicado Ana Turpin.
Quique San Francisco, que recrea en el filme a 'Tanit', la caricatura de un personaje que supuestamente vive en Ibiza y suele ir a la India, ha señalado que si Bofill 'comete el error de llamarme para otra película, yo iré'.
Barcelonés de 40 años, Bofill ha expresado su intención de continuar haciendo películas y de hacer otro filme 'más intimista y psicológico'.
tiene tela y la credibilidad del director es más bien escasa 