Hola, pues aquí estoy tras haber pasado tres días en Ibiza, donde hemos tenido un poco de todo: fiestón, relax por Ibiza ciudad, y playa.
Lo más sorprendente, la sesionaza de un tal Andy-B en Pacha el sábado noche. Nada de house típico de Pacha, sino tech-house, techno-pop, electro...., fantástica sesión. Sólo con decir que se cerró la sesión con el Blue Monday de New Order y el tema ese de Tiga que dice "New York's burning down down down down down down, London's burning down down down down down down...". Pacha se llenó hasta la bandera, tanto la sala grande como la global y la funky room. Lo que creo que permaneció cerrado fue la terraza de arriba y el entresuelo con la barra de Pacha.
Antes de Pacha nos pasamos por unos bares de la zona de la Virgen y del Dome para saludar a gente. Y después un rato al Anfora a ver a un amigo que curra allí, y aquello estaba tan animado como en un día de Septiembre. Nos dijeron que el subidón de gente en Ibiza se había notado esa misma semana.
Tras el cierre de Pacha entre las 7'30-8am, nos fuimos a Lucifer, que no lo conocía. La sala en sí me gustó mucho. Más grande de lo que creía, bonita decoración, muy buena música (Andy B se pasó por allí un rato a pinchar).
Finalmente a eso de las 10-11am nos fuimos a descansar, aunque mucha gente se fue al Sunrise o al Room de reafter.
También me sorprendió bastante que Ibiza estaba bastante más animada de lo que me esperaba para estas fechas, sin haber empezado las aperturas. Sobretodo alemanes, ingleses y franceses, y menos españoles e italianos, que se concentran más en los meses de agosto y septiembre. Estaban todos los bares de copas del puerto y aledaños abiertos. Nada de masificaciones, pero tampoco la sensación de estar en un lugar con poca marcha. La temperatura de cine.
Tras el fiestón necesitamos todo el resto del domingo para recuperarnos. Esa noche, la del domingo, después de cenar y volver por algunos garitos, estuvimos en el Anfora hasta las 4, porque al día sgte, el lunes, nos fuimos a cala Xuclà, al norte. El día no salió muy soleado, pero se estaba de cine. Eso sí, el agua estaba helada! brrr. Esa noche tras cenar en la plaza del Parque (zona de terrazas muy recomendable para almorzar, tomar un aperitivo o tomar la primera copa y que está llena a casi todas horas), y volver a dar una vuelta por la calle de la Virgen y la zona del Dome, Lola's, etc, volvimos al Anfora hasta una hora antes de pillar el vuelo de regreso, a las 7'20.
Total, que vale mucho la pena visitar Ibiza en esta época. Se ve mucha más gente bohemia porque no hay tanto fashion-garrulo de los que llenan la isla en pleno agosto.
Lo más sorprendente, la sesionaza de un tal Andy-B en Pacha el sábado noche. Nada de house típico de Pacha, sino tech-house, techno-pop, electro...., fantástica sesión. Sólo con decir que se cerró la sesión con el Blue Monday de New Order y el tema ese de Tiga que dice "New York's burning down down down down down down, London's burning down down down down down down...". Pacha se llenó hasta la bandera, tanto la sala grande como la global y la funky room. Lo que creo que permaneció cerrado fue la terraza de arriba y el entresuelo con la barra de Pacha.
Antes de Pacha nos pasamos por unos bares de la zona de la Virgen y del Dome para saludar a gente. Y después un rato al Anfora a ver a un amigo que curra allí, y aquello estaba tan animado como en un día de Septiembre. Nos dijeron que el subidón de gente en Ibiza se había notado esa misma semana.
Tras el cierre de Pacha entre las 7'30-8am, nos fuimos a Lucifer, que no lo conocía. La sala en sí me gustó mucho. Más grande de lo que creía, bonita decoración, muy buena música (Andy B se pasó por allí un rato a pinchar).
Finalmente a eso de las 10-11am nos fuimos a descansar, aunque mucha gente se fue al Sunrise o al Room de reafter.
También me sorprendió bastante que Ibiza estaba bastante más animada de lo que me esperaba para estas fechas, sin haber empezado las aperturas. Sobretodo alemanes, ingleses y franceses, y menos españoles e italianos, que se concentran más en los meses de agosto y septiembre. Estaban todos los bares de copas del puerto y aledaños abiertos. Nada de masificaciones, pero tampoco la sensación de estar en un lugar con poca marcha. La temperatura de cine.
Tras el fiestón necesitamos todo el resto del domingo para recuperarnos. Esa noche, la del domingo, después de cenar y volver por algunos garitos, estuvimos en el Anfora hasta las 4, porque al día sgte, el lunes, nos fuimos a cala Xuclà, al norte. El día no salió muy soleado, pero se estaba de cine. Eso sí, el agua estaba helada! brrr. Esa noche tras cenar en la plaza del Parque (zona de terrazas muy recomendable para almorzar, tomar un aperitivo o tomar la primera copa y que está llena a casi todas horas), y volver a dar una vuelta por la calle de la Virgen y la zona del Dome, Lola's, etc, volvimos al Anfora hasta una hora antes de pillar el vuelo de regreso, a las 7'20.
Total, que vale mucho la pena visitar Ibiza en esta época. Se ve mucha más gente bohemia porque no hay tanto fashion-garrulo de los que llenan la isla en pleno agosto.
